Unos consejos para ser buen padre...

1) Padre no naces sino te haces. Por eso es importante admitir tu naturaleza imperfecta y a la vez reclamar tu derecho de aprender y evolucionar a través de tus errores, los cuales reconoces con responsabilidad y con compresión.

2) El buen padre igual que el buen maestro, no enseña con sus palabras sino con sus ejemplos. Cada padre está obligado a aplicar lo que pide a su hijo y constituir un estándar ideal para el.

3) Cada padre es responsable por la salud corporal y sentimental de sus hijos. Sin embargo esta responsabilidad no se tiene que convertir en una sobre protección o en un control asfixiante. Cada hijo tiene derecho a la protección y al autonomía parcial a la vez independientemente en la etapa en la que se encuentra.

4) La relación entre un padre y un hijo tiene que ser una relación de aceptación. Cualquier tipo de relación reside en una aceptación sin excepción y sin términos. Una relación con términos no es relación sana.

5) El padre tiene que confiar en su hijo.

6) Es muy importante que le enseñemos un conjunto de valores y principios. Cooperación, paciencia, justicia, honradez y amabilidad es lo mejor que le podemos inculcar.

7) El padre ideal es aquel que está dispuesto a escuchar a su hijo sin intervenir, con discreción y paciencia.

8) A cada padre le tiene que interesar la vida de su hijo. Es imprescindible saber cómo pasa su día, quienes son sus amigos o que le que le gusta. El padre tiene que disponer de su tiempo.

9) Un padre no es perfecto igual que nadie. Pero puede ser consecuente con sus palabras y con actos. Lo que puede convencer a nuestros hijos es nuestra sabiduría. La demostración de fuerza no sirve para nada.

10) El padre tiene que darle cariño generosamente. Los hijos no tienen peligro de darles algo por amor en exceso. Tienen peligro por deficiencia de amor o por excesiva permisividad e indulgencia o por bienes materiales que funcionan como sustitutos de amor.

11) Nunca olvides amarte a ti mismo...

Espero que os haya gustado.

Que tengáis un buen día. Hasta la próxima.